Salmos 119:161-168

Salmos 119:161-168

Shin

161 Los poderosos me persiguen sin motivo, pero yo respeto y honro tu palabra.

162 Es tal la alegría que me causa tu palabra que es como hallar un gran tesoro.

163 No soporto la mentira. ¡La aborrezco!. Pero amo tus enseñanzas.

164 Siete veces al día te alabo porque tus juicios son siempre justos.

165 Los que aman tu ley viven en completa paz, porque saben que no tropezarán.

166 Señor, espero que me salves; mientras viva, cumpliré tus mandamientos.

167 Toda mi vida he obedecido tus estatutos, pues son el gran amor de mi vida.

168 He cumplido tus mandamientos y tus testimonios pues tú sabes todo lo que hago.

EL AGRADECIMIENTO DEL SALMISTA

El salmista ha decidido guardar la Palabra (v.161; 166b; 168) y agradece al Señor:

1.       Por su protección frente a “poderosos” (v.161)

2.       Por la alegría de tener un gran tesoro (v.162)

3.       Porque le da integridad (v.163)

4.       Por Su justicia (v.164)

5.       Por Su paz  y guía (v.165)

6.       Por Su salvación (v.166)

7.       Porque sus mandamientos son el amor de su vida (v.167)

Preg. Aplic.: ¿Estoy confiando en la protección de Dios y en Su justicia?, ¿estoy buscando la guía de Dios y teniendo paz en mi vida?

Oremos,

Pedro A. Torres Guzmán

http://atalaatucuello.blogspot.com/

Equipo AATC

Salmos 119:153-160

Salmos 119:153-160

Resh

153 Mira mi aflicción, y ven a salvarme, pues no me he olvidado de tu ley.

154 ¡Defiéndeme, y ponme a salvo! ¡Dame vida con tu palabra!

155 Los malvados están lejos de tu salvación, porque no buscan tus estatutos.

156 Señor, tú eres muy bondadoso; ¡dame vida de acuerdo a tu justicia!

157 Son muchos los enemigos que me persiguen, pero yo no me aparto de tus testimonios.

158 No soporto ver a esos traidores, porque no obedecen tus palabras.

159 Señor, ¡mira cuánto amo tus mandamientos! ¡dame vida, conforme a tu misericordia!

160 La verdad es la esencia de tu palabra, y tus juicios son siempre justos.

LA ORACION POR SALVACION DE DIOS

El salmista da razones para que Dios le salve y le defienda (v.153-154:

1.       No ha olvidado la ley de Dios (v.153b)

2.       Los que lo atacan están fuera de Su salvación porque no buscan ni obedecen Sus estatutos (v.155; 158)

3.       Porque Dios es bondadoso (v.156)

4.       No se aparta de Sus mandamientos a pesar que le persiguen (v.157)

5.       Porque ama Sus mandamientos (v.159a)

6.       Por Su misericordia que le de vida (v.159b)

7.       Por Su verdad y su justicia (v.160)

Preg. Aplic.: ¿Estoy guardando y obedeciendo la Palabra de Dios?, ¿estoy confiando en su salvación y protección?

Oremos,

Pedro A. Torres Guzmán

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Equipo AATC

Salmos 119:145-152

Salmos 119:145-152

Cof

145 Señor, yo te llamo con todo el corazón; ¡respóndeme, y cumpliré tus estatutos!

146 ¡Sálvame, pues a ti elevo mi clamor! ¡Quiero obedecer tus testimonios!

147 Clamo a ti antes de que amanezca, y me quedo esperando tu respuesta.

148 Me mantengo despierto toda la noche para meditar en tus mandatos.

149 Señor, escúchame, por tu misericordia; ¡dame vida, conforme a tu justicia!

150 Mis malvados perseguidores ya están cerca, pero de tu ley están muy lejos.

151 Pero tú, Señor, sí estás muy cerca, y todos tus mandamientos son verdad.

152 Hace tiempo llegué a conocer tus mandatos, los cuales estableciste para la eternidad.

EL CLAMOR DEL SALMISTA

El salmista ha llegado a conocer los mandamientos de Dios (v.152) y sabe que el Señor está cerca (v.151) y ante los perseguidores (v.150) eleva su clamor:

1.       Llama a Dios con todo su corazón (v.145a)

2.       Confía en la respuesta de Dios promete obediencia a Sus mandamientos (v.145b)

3.       Pide la salvación del Señor y anhela obedecer los mandamientos (v.146)

4.       Clama al Señor antes que amanezca y espera la pronta respuesta de Dios (v.147)

5.       Medita en los mandamientos del Señor toda la noche (v.148)

6.       Confía en la misericordia del Señor (v.149a)

7.       Pide vida conforme a la justicia de Dios (v.149b)

Preg. Aplic.: ¿Estoy llamando y buscando a Dios en medio de las dificultades?, ¿Confio y creo en la salvación de Dios?, ¿estoy meditando y obedeciendo los mandamientos de Dios?

Oremos,

Pedro A. Torres Guzmán

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Equipo AATC