sábado, 3 de octubre de 2020

Marcos 3


 Marcos 3

1 Jesús volvió a visitar la sinagoga, y allí se encontró con un hombre que tenía una mano atrofiada.

2 Algunos lo vigilaban, para ver si sanaba al hombre en el día de reposo y así poder acusarlo.

3 Jesús le dijo al hombre con la mano atrofiada: «Levántate, y ponte en medio.»

4 A los demás les preguntó: «¿Qué está permitido hacer en los días de reposo? ¿El bien, o el mal? ¿Salvar una vida, o quitar la vida?» Ellos guardaron silencio.

5 Jesús los miró con enojo y tristeza, al ver la dureza de sus corazones. Entonces dijo al hombre: «Extiende la mano.» El hombre la extendió, y su mano quedó sana.

6 Tan pronto como los fariseos salieron, empezaron a conspirar con los herodianos para matar a Jesús.

7 Jesús se retiró al lago con sus discípulos, y mucha gente de Galilea y de Judea lo siguió 8 al enterarse de todo lo que hacía. También acudieron a él muchos de Jerusalén, de Idumea y del otro lado del Jordán, así como de los alrededores de Tiro y de Sidón.

9 Por causa del gentío, y para evitar que lo apretujaran, Jesús pidió a sus discípulos tener siempre lista una barca; 10 y es que, como había sanado a muchos, todos los que tenían plagas querían tocarlo y se lanzaban sobre él.

11 Cuando los espíritus impuros lo veían, se arrodillaban delante de él y a gritos le decían: «¡Tú eres el Hijo de Dios!»

12 Pero él les exigía con toda firmeza que no revelaran quién era él.

13 Después Jesús subió a un monte y llamó a los que él quiso, y ellos se reunieron con él.

14 A doce de ellos los designó para que estuvieran con él, para enviarlos a predicar, 15 y para que tuvieran el poder de expulsar demonios.

16 Estos doce eran: Simón, a quien puso por nombre «Pedro»; 17 Jacobo y su hermano Juan, hijos de Zebedeo, a quienes les puso por nombre «Boanerges», que significa «Hijos del trueno»; 18 Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Tadeo, Simón el cananista, 19 y Judas Iscariote, que fue quien lo traicionó.

20 Jesús entró en una casa, y de nuevo se juntó tanta gente, que ni siquiera podían comer él y sus discípulos.

21 Cuando sus familiares lo supieron, fueron para llevárselo, porque pensaban que estaba fuera de sí.

22 Pero los escribas que habían venido de Jerusalén decían: «A éste lo domina Beelzebú. Y expulsa a los demonios por el poder del príncipe de los demonios.»

23 Entonces Jesús los llamó, y en parábolas les dijo: «¿Y cómo puede Satanás expulsar a Satanás?

24 Si un reino se divide contra sí mismo, no puede permanecer. 25 Si una casa se divide contra sí misma, tampoco puede permanecer.

26 Y si Satanás se subleva contra sí mismo, y se divide, tampoco puede permanecer. Su fin habrá llegado.

27 Nadie puede entrar en la casa de un hombre fuerte y robarle sus pertenencias, si antes no lo ata. Entonces sí podrá saquear su casa.

28 »De cierto les digo que a todos ustedes se les perdonará todo pecado y toda blasfemia, 29 pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo jamás será perdonado, sino que será culpable de un pecado eterno.»

30 Y es que ellos habían dicho: «Éste tiene un espíritu impuro.»

31 Llegaron entonces la madre y los hermanos de Jesús, pero se quedaron afuera y mandaron a llamarlo.

32 La muchedumbre sentada a su alrededor le dijo: «Tu madre, tus hermanos y tus hermanas están allí afuera, y te buscan.»

33 Jesús les respondió: «¿Y quién es mi madre, y mis hermanos?»

34 Miró entonces a los que estaban sentados a su alrededor, y dijo: «Mi madre y mis hermanos están aquí.

35 Porque todo el que hace la voluntad de Dios es mi hermano, y mi hermana, y mi madre.»

 

JESUS SANA, LLAMA A SUS DISCIPULOS Y ENSEÑA

1.       Jesús sana a hombre de la mano atrofiada y autoridad sobre demonios (v.1-12)

Jesús va a en día de reposo a la sinagoga, hay un hombre con mano atrofiada y quería enseñar a los fariseos y pregunta si hace bien o mal en el reposo. El Señor con tristeza y enojo por la dureza de los religiosos, le pide al hombre extender su mano y lo sana.

A Jesús, lo siguieron mucha de gente de Galilea y de ciudades de alrededor para que los sane. Los espíritus inmundos lo reconocían como hijo de Dios y les dio la orden de no revelarlo.

Preg.Aplic.: ¿Estoy siendo legalista y religioso en mi conducta?, ¿estoy orando por sanidades hoy?, ¿ejerzo mi autoridad en Cristo contra demonios?

2.       Los discípulos de Jesús (v.13-19)

Jesús llamó a doce discípulos para que estuvieran con El, para que vayan a predicar y a expulsar demonios. Pedro, Jacobo, Juan, Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás Jacobo hijo de Alfeo, Tadeo, Simon el cananista y el traicionero Judas.

Preg.Aplic.: ¿Estoy buscando y teniendo una relación con Dios?, ¿estoy usando mi tiempo para aprender de la biblia?

3.       La blasfemia contra el Espíritu Santo (v.20-30)

Jesús está incomodo en una casa a full. Los fariseos lo acusan que expulsa demonios por Beelzebú. El Señor les responde que no es posible que satanas se subleve contra sí mismo. El Señor señala que hay perdón para todo pecado, salvo la blasfemia contra el Espíritu Santo que será un pecado eterno. Los fariseos señalan que Jesús tenía un espíritu impuro.

Preg.Aplic.: ¿Creo en el poder libertador de Cristo?, ¿confío y vivo en la victoria de Cristo en la cruz contra el pecado y satanas?, ¿he entregado mi vida a Cristo y creo que El es el Mesías prometido?

4.       La familia de Jesús (v.31-35)

Llego su mamá y hermanos de Jesús, y lo llamaron. Pero, el responde que su madre y hermanos son los que hacen la voluntad de Dios.

Preg. Aplic.: ¿Estoy haciendo la voluntad de Dios?, ¿estoy viviendo a diario los principios del reino mostrados en la biblia?

 

Oremos,

 

Pedro A. Torres Guzmán

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Pueden ver el video de la aplicación del devocional en el link:

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Equipo AATC

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