Salmos 122
1 Yo me
alegro con los que me dicen: «Vamos a la casa del Señor.»
2 Ya
nuestros pies se dan prisa; ¡ya estamos, Jerusalén, ante tus puertas!
3 La ciudad
de Jerusalén fue construida como centro de reunión de la comunidad.
4 Todas las
tribus del Señor llegan a ella, cumpliendo con la orden dada a Israel de alabar
allí el nombre del Señor.
5 Allí se
encuentran los tribunales de justicia; allí está el trono de la casa de David.
6 Pidamos
por la paz de Jerusalén, y porque prosperen los que te aman.
7 Que haya
paz dentro de tus murallas, y se respire tranquilidad en tus palacios.
8 Por mis
hermanos y mis compañeros, ruego a Dios que haya paz en ti.
9 Por el
templo del Señor nuestro Dios, pido a Dios que te dé bienestar.
LA ALABANZA EN COMUNIDAD
El salmista
se alegra cuando alaba a Dios en comunidad:
1.
La alegría de ir (v.1-5)
Preg. Aplic.: ¿Me estoy congregando en mi
iglesia?, ¿tengo alegría de congregarme?, ¿estoy obedeciendo al Señor?
2.
Orar por la paz de Jerusalén (v.6-9)
Preg.
Aplic.: ¿Estoy orando por Israel?, ¿estoy intercediendo por mi iglesia y por
sus autoridades para que se haga Su voluntad?
Oremos,
Pedro A. Torres Guzmán
Equipo AATC
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