jueves, 25 de agosto de 2016

Eclesiastés 9

Eclesiastés 9
1 Ciertamente he dado mi corazón a todas estas cosas, para declarar todo esto: que los justos y los sabios, y sus obras, están en la mano de Dios; que sea amor o que sea odio, no lo saben los hombres; todo está delante de ellos.
2 Todo acontece de la misma manera a todos; un mismo suceso ocurre al justo y al impío; al bueno, al limpio y al no limpio; al que sacrifica, y al que no sacrifica; como al bueno, así al que peca; al que jura, como al que teme el juramento.
3 Este mal hay entre todo lo que se hace debajo del sol, que un mismo suceso acontece a todos, y también que el corazón de los hijos de los hombres está lleno de mal y de insensatez en su corazón durante su vida; y después de esto se van a los muertos.
4 Aún hay esperanza para todo aquel que está entre los vivos; porque mejor es perro vivo que león muerto.
5 Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido.
6 También su amor y su odio y su envidia fenecieron ya; y nunca más tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol.
7 Anda, y come tu pan con gozo, y bebe tu vino con alegre corazón; porque tus obras ya son agradables a Dios.
8 En todo tiempo sean blancos tus vestidos, y nunca falte ung:uento sobre tu cabeza.
9 Goza de la vida con la mujer que amas, todos los días de la vida de tu vanidad que te son dados debajo del sol, todos los días de tu vanidad; porque esta es tu parte en la vida, y en tu trabajo con que te afanas debajo del sol.
10 Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni sabiduría.
11 Me volví y vi debajo del sol, que ni es de los ligeros la carrera, ni la guerra de los fuertes, ni aun de los sabios el pan, ni de los prudentes las riquezas, ni de los elocuentes el favor; sino que tiempo y ocasión acontecen a todos.
12 Porque el hombre tampoco conoce su tiempo; como los peces que son presos en la mala red, y como las aves que se enredan en lazo, así son enlazados los hijos de los hombres en el tiempo malo, cuando cae de repente sobre ellos.
13 También vi esta sabiduría debajo del sol, la cual me parece grande:
14 una pequeña ciudad, y pocos hombres en ella; y viene contra ella un gran rey, y la asedia y levanta contra ella grandes baluartes; 15 y se halla en ella un hombre pobre, sabio, el cual libra a la ciudad con su sabiduría; y nadie se acordaba de aquel hombre pobre.
16 Entonces dije yo: Mejor es la sabiduría que la fuerza, aunque la ciencia del pobre sea menospreciada, y no sean escuchadas sus palabras.
17 Las palabras del sabio escuchadas en quietud, son mejores que el clamor del señor entre los necios.
18 Mejor es la sabiduría que las armas de guerra; pero un pecador destruye mucho bien.

LA CRUDA VIDA DE HOY
1.       La vida y la muerte (v.1-10)
Existe una contradicción aparente: todas las personas van a morir, y no importa el estilo de vida llevado. Pero, no es así “porque mientras haya vida, hay esperanza”, en cambio con la muerte se acaba todo Por ello, disfruta de la vida y aprovechala con tu esposa que Dios te ha dado, y haz las cosas bien.
Preg.Aplic.: ¿Cómo estoy viviendo hoy?, ¿estoy aprovechando la vida la máximo?, ¿estoy disfrutando de la vida con la esposa que Dios me ha dado?, ¿estoy haciendo las cosas bien?
2.       La injusticia de la vida (v.11-18)
No necesariamente porque haga las cosas correctamente me va a ir bien en todo, también puedo caer en desgracias. A veces, el éxito es una suerte que Dios da. La sabiduría es mejor que la fuerza y el dinero.
Preg.Aplic.:¿Estoy agradecido por la vida que Dios me ha dado independientemente de las circunstancias?, ¿estoy viviendo en contentamiento?, ¿disfruto y aprovecho las oportunidades de Dios?, ¿estoy buscando la sabiduría de Dios?

Oremos,

Pedro A. Torres Guzmán

Equipo AATC

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