miércoles, 23 de julio de 2014

Job 38

Job 38
38 Entonces respondió Jehová a Job desde un torbellino, y dijo: 
2 ¿Quién es ése que oscurece el consejo
Con palabras sin sabiduría? 
3 Ahora ciñe como varón tus lomos;
Yo te preguntaré, y tú me contestarás.
4 ¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra?
Házmelo saber, si tienes inteligencia.
5 ¿Quién ordenó sus medidas, si lo sabes?
¿O quién extendió sobre ella cordel?
6 ¿Sobre qué están fundadas sus bases?
¿O quién puso su piedra angular,
7 Cuando alababan todas las estrellas del alba,
Y se regocijaban todos los hijos de Dios?
8 ¿Quién encerró con puertas el mar,
Cuando se derramaba saliéndose de su seno,
9 Cuando puse yo nubes por vestidura suya,
Y por su faja oscuridad,
10 Y establecí sobre él mi decreto,
Le puse puertas y cerrojo,
11 Y dije: Hasta aquí llegarás, y no pasarás adelante,
Y ahí parará el orgullo de tus olas?
12 ¿Has mandado tú a la mañana en tus días?
¿Has mostrado al alba su lugar,
13 Para que ocupe los fines de la tierra,
Y para que sean sacudidos de ella los impíos?
14 Ella muda luego de aspecto como barro bajo el sello,
Y viene a estar como con vestidura;
15 Mas la luz de los impíos es quitada de ellos,
Y el brazo enaltecido es quebrantado.
16 ¿Has entrado tú hasta las fuentes del mar,
Y has andado escudriñando el abismo?
17 ¿Te han sido descubiertas las puertas de la muerte,
Y has visto las puertas de la sombra de muerte?
18 ¿Has considerado tú hasta las anchuras de la tierra?
Declara si sabes todo esto.
19 ¿Por dónde va el camino a la habitación de la luz,
Y dónde está el lugar de las tinieblas,
20 Para que las lleves a sus límites,
Y entiendas las sendas de su casa?
21 !!Tú lo sabes! Pues entonces ya habías nacido,
Y es grande el número de tus días.
22 ¿Has entrado tú en los tesoros de la nieve,
O has visto los tesoros del granizo,
23 Que tengo reservados para el tiempo de angustia,
Para el día de la guerra y de la batalla?
24 ¿Por qué camino se reparte la luz,
Y se esparce el viento solano sobre la tierra?
25 ¿Quién repartió conducto al turbión,
Y camino a los relámpagos y truenos,
26 Haciendo llover sobre la tierra deshabitada,
Sobre el desierto, donde no hay hombre,
27 Para saciar la tierra desierta e inculta,
Y para hacer brotar la tierna hierba?
28 ¿Tiene la lluvia padre?
¿O quién engendró las gotas del rocío?
29 ¿De qué vientre salió el hielo?
Y la escarcha del cielo, ¿quién la engendró?
30 Las aguas se endurecen a manera de piedra,
Y se congela la faz del abismo.
31 ¿Podrás tú atar los lazos de las Pléyades,
O desatarás las ligaduras de Orión?
32 ¿Sacarás tú a su tiempo las constelaciones de los cielos,
O guiarás a la Osa Mayor con sus hijos?
33 ¿Supiste tú las ordenanzas de los cielos?
¿Dispondrás tú de su potestad en la tierra?
34 ¿Alzarás tú a las nubes tu voz,
Para que te cubra muchedumbre de aguas?
35 ¿Enviarás tú los relámpagos, para que ellos vayan?
¿Y te dirán ellos: Henos aquí?
36 ¿Quién puso la sabiduría en el corazón?
¿O quién dio al espíritu inteligencia?
37 ¿Quién puso por cuenta los cielos con sabiduría?
Y los odres de los cielos, ¿quién los hace inclinar,
38 Cuando el polvo se ha convertido en dureza,
Y los terrones se han pegado unos con otros?
39 ¿Cazarás tú la presa para el león?
¿Saciarás el hambre de los leoncillos,
40 Cuando están echados en las cuevas,
O se están en sus guaridas para acechar?
41 ¿Quién prepara al cuervo su alimento,
Cuando sus polluelos claman a Dios,
Y andan errantes por falta de comida?

Jehová convence a Job de su ignorancia
1. La revelación de Dios a Job es grandiosa. No contesta las preguntas de Job, antes, por el contrario, le hace a su siervo muchas inquisiciones que le ponen en dificultades. El Señor advierte a Job que sus palabras no han sido sabias (v2) y lo desafía a mostrar su hombría (v3).

He intentado ser más sabio que Dios?¿a menudo dudo de la voluntad de Dios en mi vida?¿he pensado que Dios se ha equivocado en enviarme algunas pruebas?

2. Dios una a una enumera sus maravillas, como la fundación de la tierra (v4), la creación de los mares y su contención (v8), el establecimiento del día y la noche (v12), el Señor le pregunta a Job si tiene idea de la magnitud de la tierra? (v18) además continua interrogándolo ¿puede guiar el movimiento de las estrellas?(v31) también le dice ¿Quién da la intuición al corazón y el instinto a la mente?(v36).

Cómo pues podremos comparar la grandeza de nuestro Dios, con nuestra inteligencia con nuestra sabiduría y juicio?

Oremos,
Equipo AATC

martes, 22 de julio de 2014

Job 36-37

Job 36-37
36 Añadió Eliú y dijo: 
2 Espérame un poco, y te enseñaré;
Porque todavía tengo razones en defensa de Dios. 
3 Tomaré mi saber desde lejos,
Y atribuiré justicia a mi Hacedor. 
4 Porque de cierto no son mentira mis palabras;
Contigo está el que es íntegro en sus conceptos.
5 He aquí que Dios es grande, pero no desestima a nadie;
Es poderoso en fuerza de sabiduría.
6 No otorgará vida al impío,
Pero a los afligidos dará su derecho.
7 No apartará de los justos sus ojos;
Antes bien con los reyes los pondrá en trono para siempre,
Y serán exaltados.
8 Y si estuvieren prendidos en grillos,
Y aprisionados en las cuerdas de aflicción,
9 El les dará a conocer la obra de ellos,
Y que prevalecieron sus rebeliones.
10 Despierta además el oído de ellos para la corrección,
Y les dice que se conviertan de la iniquidad.
11 Si oyeren, y le sirvieren,
Acabarán sus días en bienestar,
Y sus años en dicha.
12 Pero si no oyeren, serán pasados a espada,
Y perecerán sin sabiduría.
13 Mas los hipócritas de corazón atesoran para sí la ira,
Y no clamarán cuando él los atare.
14 Fallecerá el alma de ellos en su juventud,
Y su vida entre los sodomitas.
15 Al pobre librará de su pobreza,
Y en la aflicción despertará su oído.
16 Asimismo te apartará de la boca de la angustia
A lugar espacioso, libre de todo apuro,
Y te preparará mesa llena de grosura.
17 Mas tú has llenado el juicio del impío,
En vez de sustentar el juicio y la justicia.
18 Por lo cual teme, no sea que en su ira te quite con golpe,
El cual no puedas apartar de ti con gran rescate.
19 ¿Hará él estima de tus riquezas, del oro,
O de todas las fuerzas del poder?
20 No anheles la noche,
En que los pueblos desaparecen de su lugar.
21 Guárdate, no te vuelvas a la iniquidad;
Pues ésta escogiste más bien que la aflicción.
22 He aquí que Dios es excelso en su poder;
¿Qué enseñador semejante a él?
23 ¿Quién le ha prescrito su camino?
¿Y quién le dirá: Has hecho mal?
24 Acuérdate de engrandecer su obra,
La cual contemplan los hombres.
25 Los hombres todos la ven;
La mira el hombre de lejos.
26 He aquí, Dios es grande, y nosotros no le conocemos,
Ni se puede seguir la huella de sus años.
27 El atrae las gotas de las aguas,
Al transformarse el vapor en lluvia,
28 La cual destilan las nubes,
Goteando en abundancia sobre los hombres.
29 ¿Quién podrá comprender la extensión de las nubes,
Y el sonido estrepitoso de su morada?
30 He aquí que sobre él extiende su luz,
Y cobija con ella las profundidades del mar.
31 Bien que por esos medios castiga a los pueblos,
A la multitud él da sustento.
32 Con las nubes encubre la luz,
Y le manda no brillar, interponiendo aquéllas.
33 El trueno declara su indignación,
Y la tempestad proclama su ira contra la iniquidad.
37 Por eso también se estremece mi corazón,
Y salta de su lugar.
2 Oíd atentamente el estrépito de su voz,
Y el sonido que sale de su boca.
3 Debajo de todos los cielos lo dirige,
Y su luz hasta los fines de la tierra.
4 Después de ella brama el sonido,
Truena él con voz majestuosa;
Y aunque sea oída su voz, no los detiene.
5 Truena Dios maravillosamente con su voz;
El hace grandes cosas, que nosotros no entendemos.
6 Porque a la nieve dice: Desciende a la tierra;
También a la llovizna, y a los aguaceros torrenciales.
7 Así hace retirarse a todo hombre,
Para que los hombres todos reconozcan su obra.
8 Las bestias entran en su escondrijo,
Y se están en sus moradas.
9 Del sur viene el torbellino,
Y el frío de los vientos del norte.
10 Por el soplo de Dios se da el hielo,
Y las anchas aguas se congelan.
11 Regando también llega a disipar la densa nube,
Y con su luz esparce la niebla.
12 Asimismo por sus designios se revuelven las nubes en derredor,
Para hacer sobre la faz del mundo,
En la tierra, lo que él les mande.
13 Unas veces por azote, otras por causa de su tierra,
Otras por misericordia las hará venir.
14 Escucha esto, Job;
Detente, y considera las maravillas de Dios.
15 ¿Sabes tú cómo Dios las pone en concierto,
Y hace resplandecer la luz de su nube?
16 ¿Has conocido tú las diferencias de las nubes,
Las maravillas del Perfecto en sabiduría?
17 ¿Por qué están calientes tus vestidos
Cuando él sosiega la tierra con el viento del sur?
18 ¿Extendiste tú con él los cielos,
Firmes como un espejo fundido?
19 Muéstranos qué le hemos de decir;
Porque nosotros no podemos ordenar las ideas a causa de las tinieblas.
20 ¿Será preciso contarle cuando yo hablare?
Por más que el hombre razone, quedará como abismado.
21 Mas ahora ya no se puede mirar la luz esplendente en los cielos,
Luego que pasa el viento y los limpia,
22 Viniendo de la parte del norte la dorada claridad.
En Dios hay una majestad terrible.
23 El es Todopoderoso, al cual no alcanzamos, grande en poder;
Y en juicio y en multitud de justicia no afligirá.
24 Lo temerán por tanto los hombres;
El no estima a ninguno que cree en su propio corazón ser sabio.
Eliú exalta la grandeza de Dios
Eliú nos habla de la gloria divina: “He aquí, Dios es grande, y nosotros no le conocemos, ni se puede seguir la huella de sus años” (36:26). “Él hace grandes cosas, que nosotros no entendemos” (37:5).

Según Eliú Dios es:
- Un Dios grande y nos desestima a nadie (v5)
- Poderoso en fuerza y sabiduría(v5)
- Protector de los justos(v7)
- Todopoderoso (37:5)
El poderío de Dios es gigantesco, qué enseñador tendremos aparte de ÉL? ¿Quién nos ha prescrito el camino?(36 22:23). Amado(a) es imposible no estremecernos con este privilegio, nada en el mundo se comparará con conocer la Gloria de nuestro Señor! Podemos vivir confiados porque tenemos un Dios infinito y Omnipotente, para ayudarnos, para darnos sabiduría y para indicarnos las sendas en las que tenemos que andar, recuerda amado(a) que estamos llamados a transitar este mundo como peregrinos, como meros residentes temporarios que viajan en forma ligera.
Oremos,
Equipo AATC

lunes, 21 de julio de 2014

Job 35

Job 35
35 Prosiguió Eliú en su razonamiento, y dijo:
2 ¿Piensas que es cosa recta lo que has dicho:
Más justo soy yo que Dios?
3 Porque dijiste: ¿Qué ventaja sacaré de ello?
¿O qué provecho tendré de no haber pecado?
4 Yo te responderé razones,
Y a tus compañeros contigo.
5 Mira a los cielos, y ve,
Y considera que las nubes son más altas que tú.
6 Si pecares, ¿qué habrás logrado contra él?
Y si tus rebeliones se multiplicaren, ¿qué le harás tú?
7 Si fueres justo, ¿qué le darás a él?
¿O qué recibirá de tu mano?
8 Al hombre como tú dañará tu impiedad,
Y al hijo de hombre aprovechará tu justicia.
9 A causa de la multitud de las violencias claman,
Y se lamentan por el poderío de los grandes.
10 Y ninguno dice: ¿Dónde está Dios mi Hacedor,
Que da cánticos en la noche,
11 Que nos enseña más que a las bestias de la tierra,
Y nos hace sabios más que a las aves del cielo?
12 Allí clamarán, y él no oirá,
Por la soberbia de los malos.
13 Ciertamente Dios no oirá la vanidad,
Ni la mirará el Omnipotente.
14 ¿Cuánto menos cuando dices que no haces caso de él?
La causa está delante de él; por tanto, aguárdale.
15 Mas ahora, porque en su ira no castiga,
Ni inquiere con rigor,
16 Por eso Job abre su boca vanamente,
Y multiplica palabras sin sabiduría.

Eliú prosigue su discurso

1. Eliú acierta en señalar la dignidad que Dios da a los hombres, que les “enseña más que a las bestias de la tierra y hace sabios más que a las aves del cielo” (v.11).

Amado(a) nuestra dignidad está en el Señor, ÉL nos otorga valía, si pensamos que no tenemos sabiduría o no actuamos con inteligencia, pidámosla a Dios y seamos diligentes en leer la palabra, en meditarla de día y de noche.

2. En los versículos 12 y 13; Eliú nos habla de la soberbia de los malos y de como Dios los resiste y no oye su clamor, recuerdan los que aprendimos en Santiago 4:6 “Pero ÉL da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes”.

Significado de soberbia: Sentimiento de valoración de uno mismo por encima de los demás. Trasladando este concepto a nuestra vida cristiana, sería que el creyente con más años en la fe se podría sentir que tiene mayor conocimiento de Dios que el creyente nuevo, o pensar que ya no tiene nada que aprender, porque ya lo ha estudiado antes. ERROR!, nunca terminaremos de aprender o entender lo que Dios nos quiere hablar mediante su palabra, siempre existirá una mejor manera de servir a Dios, aunque esta se haya dado con anterioridad.

Amado(a) te invito a que hoy, aceptemos ante Dios nuestras limitaciones, que nos esforcemos, y que lo entreguemos TODO (tiempo, dinero, ganas, etc.)En contribuir a su obra, en tener compasión por esas almas que a diario se pierden porque ni tú ni yo les predicamos, sin duda Dios no nos necesita, porque ÉL es TODOPODEROSO, pero que PRIVILEGIO es contribuir con el plan de salvación que nuestro Señor ha diseñado.

Oremos,

Equipo AATC

domingo, 20 de julio de 2014

Job 34

Job 34 
Además Eliú dijo: 
2 Oíd, sabios, mis palabras;
Y vosotros, doctos, estadme atentos. 
3 Porque el oído prueba las palabras,
Como el paladar gusta lo que uno come.
4 Escojamos para nosotros el juicio,
Conozcamos entre nosotros cuál sea lo bueno.
5 Porque Job ha dicho: Yo soy justo,
Y Dios me ha quitado mi derecho.
6 ¿He de mentir yo contra mi razón?
Dolorosa es mi herida sin haber hecho yo transgresión.
7 ¿Qué hombre hay como Job,
Que bebe el escarnio como agua,
8 Y va en compañía con los que hacen iniquidad,
Y anda con los hombres malos?
9 Porque ha dicho: De nada servirá al hombre
El conformar su voluntad a Dios.
10 Por tanto, varones de inteligencia, oídme:
Lejos esté de Dios la impiedad,
Y del Omnipotente la iniquidad.
11 Porque él pagará al hombre según su obra,
Y le retribuirá conforme a su camino.
12 Sí, por cierto, Dios no hará injusticia,
Y el Omnipotente no pervertirá el derecho.
13 ¿Quién visitó por él la tierra?
¿Y quién puso en orden todo el mundo?
14 Si él pusiese sobre el hombre su corazón,
Y recogiese así su espíritu y su aliento,
15 Toda carne perecería juntamente,
Y el hombre volvería al polvo.
16 Si, pues, hay en ti entendimiento, oye esto;
Escucha la voz de mis palabras.
17 ¿Gobernará el que aborrece juicio?
¿Y condenarás tú al que es tan justo?
18 ¿Se dirá al rey: Perverso;
Y a los príncipes: Impíos?
19 ¿Cuánto menos a aquel que no hace acepción de personas de príncipes.
Ni respeta más al rico que al pobre,
Porque todos son obra de sus manos?
20 En un momento morirán,
Y a medianoche se alborotarán los pueblos, y pasarán,
Y sin mano será quitado el poderoso.
21 Porque sus ojos están sobre los caminos del hombre,
Y ve todos sus pasos.
22 No hay tinieblas ni sombra de muerte
Donde se escondan los que hacen maldad.
23 No carga, pues, él al hombre más de lo justo,
Para que vaya con Dios a juicio.
24 El quebrantará a los fuertes sin indagación,
Y hará estar a otros en su lugar.
25 Por tanto, él hará notorias las obras de ellos,
Cuando los trastorne en la noche, y sean quebrantados.
26 Como a malos los herirá
En lugar donde sean vistos;
27 Por cuanto así se apartaron de él,
Y no consideraron ninguno de sus caminos,
28 Haciendo venir delante de él el clamor del pobre,
Y que oiga el clamor de los necesitados.
29 Si él diere reposo, ¿quién inquietará?
Si escondiere el rostro, ¿quién lo mirará?
Esto sobre una nación, y lo mismo sobre un hombre;
30 Haciendo que no reine el hombre impío
Para vejaciones del pueblo.
31 De seguro conviene que se diga a Dios:
He llevado ya castigo, no ofenderé ya más;
32 Enséñame tú lo que yo no veo;
Si hice mal, no lo haré más.
33 ¿Ha de ser eso según tu parecer?
El te retribuirá, ora rehúses, ora aceptes, y no yo;
Di, si no, lo que tú sabes.
34 Los hombres inteligentes dirán conmigo,
Y el hombre sabio que me oiga:
35 Que Job no habla con sabiduría,
Y que sus palabras no son con entendimiento.
36 Deseo yo que Job sea probado ampliamente,
A causa de sus respuestas semejantes a las de los hombres inicuos.
37 Porque a su pecado añadió rebeldía;
Bate palmas contra nosotros,
Y contra Dios multiplica sus palabras.

Eliú justifica a Dios
1. Eliú calumnia a Job como antes hicieron sus tres amigos, diciendo que él cometía pecados, todo aquello era lo que Eliú se imaginaba que Job debía estar haciendo, dado que le estaban ocurriendo cosas tan horribles.

2. Él (Eliú) prosigue su discurso detallando y defendiendo cosas obvias que nadie había negado ni discutido, como la justicia y el poder de Dios, y el fin de los seres perversos. Esto es típico de aquellas personas que no tienen mejor prueba para avalar sus afirmaciones. Acusa también a Job de pecado e impiedad, acusaciones a todas luces falsas.

3. Finalmente la última calumnia de Eliú (v9) es afirmar que Job dijo que de nada serviría al hombre hacer la voluntad de Dios; además manifiesta su deseo que Job sea probado por Dios (v36)

Amado(a), estamos seguros que en más de una oportunidad, te han calumniado, han colocado dichos en tu boca que jamás dijiste, o han exagerado una situación en la que participaste, debemos recordar siempre que a Jesús, lo calumniaron, lo golpearon, lo escupieron, lo azotaron, y lo mataron por nosotros. Tenemos el mejor abogado para mediar en todas las situaciones injustas.

Oremos,
Equipo AATC

viernes, 18 de julio de 2014

Job 33

Job 33
33  Por tanto, Job, oye ahora mis razones,
    Y escucha todas mis palabras.
He aquí yo abriré ahora mi boca,
Y mi lengua hablará en mi garganta.
Mis razones declararán la rectitud de mi corazón,
Y lo que saben mis labios, lo hablarán con sinceridad.
El espíritu de Dios me hizo,
Y el soplo del Omnipotente me dio vida.
Respóndeme si puedes;
Ordena tus palabras, ponte en pie.
Heme aquí a mí en lugar de Dios, conforme a tu dicho;
De barro fui yo también formado.
He aquí, mi terror no te espantará,
Ni mi mano se agravará sobre ti.
De cierto tú dijiste a oídos míos,
Y yo oí la voz de tus palabras que decían:
Yo soy limpio y sin defecto;
Soy inocente, y no hay maldad en mí.
10 He aquí que él buscó reproches contra mí,
Y me tiene por su enemigo;
11 Puso mis pies en el cepo,
Y vigiló todas mis sendas.
12 He aquí, en esto no has hablado justamente;
Yo te responderé que mayor es Dios que el hombre.
13 ¿Por qué contiendes contra él?
Porque él no da cuenta de ninguna de sus razones.
14 Sin embargo, en una o en dos maneras habla Dios;
Pero el hombre no entiende.
15 Por sueño, en visión nocturna,
Cuando el sueño cae sobre los hombres,
Cuando se adormecen sobre el lecho,
16 Entonces revela al oído de los hombres,
Y les señala su consejo,
17 Para quitar al hombre de su obra,
Y apartar del varón la soberbia.
18 Detendrá su alma del sepulcro,
Y su vida de que perezca a espada.
19 También sobre su cama es castigado
Con dolor fuerte en todos sus huesos,
20 Que le hace que su vida aborrezca el pan,
Y su alma la comida suave.
21 Su carne desfallece, de manera que no se ve,
Y sus huesos, que antes no se veían, aparecen.
22 Su alma se acerca al sepulcro,
Y su vida a los que causan la muerte.
23 Si tuviese cerca de él
Algún elocuente mediador muy escogido,
Que anuncie al hombre su deber;
24 Que le diga que Dios tuvo de él misericordia,
Que lo libró de descender al sepulcro,
Que halló redención;
25 Su carne será más tierna que la del niño,
Volverá a los días de su juventud.
26 Orará a Dios, y éste le amará,
Y verá su faz con júbilo;
Y restaurará al hombre su justicia.
27 El mira sobre los hombres; y al que dijere:
Pequé, y pervertí lo recto,
Y no me ha aprovechado,
28 Dios redimirá su alma para que no pase al sepulcro,
Y su vida se verá en luz.
29 He aquí, todas estas cosas hace Dios
Dos y tres veces con el hombre,
30 Para apartar su alma del sepulcro,
Y para iluminarlo con la luz de los vivientes.
31 Escucha, Job, y óyeme;
Calla, y yo hablaré.
32 Si tienes razones, respóndeme;
Habla, porque yo te quiero justificar.
33 Y si no, óyeme tú a mí;
Calla, y te enseñaré sabiduría.
Eliú censura a Job
1.       Eliú expresa su autosuficiencia, se considera asimismo como de corazón recto, de juicios justos y que sus labios hablan de manera sincera, (v3).  Abiertamente intenta ocupar el lugar de Dios (v6)

2.        Eliú acusa a Job de haber dicho: “Yo soy limpio y sin defecto; soy inocente y no hay maldad en mí” (v9). Pero la verdad es que Job había dicho: “Si yo me justificare, me condenaría mi boca; si me dijere perfecto, esto me haría inicuo” (Job 9:20).

3.       Finalmente continua expresando su “sabiduría” y le exige que le responda de acuerdo a sus razones. Porque quiere “justificarlo” (v32.33)

¿Tengo este tipo de actitudes  de autosuficiencia, hacía mis hermanos? ¿Me considero muy recto, porque no confieso mis pecados ante Dios, y nadie conoce mis debilidades?
Oremos,
Equipo AATC





jueves, 17 de julio de 2014

Job 32

Job 32
32  Cesaron estos tres varones de responder a Job, por cuanto él era justo a sus propios ojos.
Entonces Eliú hijo de Baraquel buzita, de la familia de Ram, se encendió en ira contra Job; se encendió en ira, por cuanto se justificaba a sí mismo más que a Dios.
Asimismo se encendió en ira contra sus tres amigos, porque no hallaban qué responder, aunque habían condenado a Job.
Y Eliú había esperado a Job en la disputa, porque los otros eran más viejos que él.
Pero viendo Eliú que no había respuesta en la boca de aquellos tres varones, se encendió en ira.
Y respondió Eliú hijo de Baraquel buzita, y dijo:
    Yo soy joven, y vosotros ancianos;
    Por tanto, he tenido miedo, y he temido declararos mi opinión.
Yo decía: Los días hablarán,
Y la muchedumbre de años declarará sabiduría.
Ciertamente espíritu hay en el hombre,
Y el soplo del Omnipotente le hace que entienda.
No son los sabios los de mucha edad,
Ni los ancianos entienden el derecho.
10 Por tanto, yo dije: Escuchadme;
Declararé yo también mi sabiduría.
11 He aquí yo he esperado a vuestras razones,
He escuchado vuestros argumentos,
En tanto que buscabais palabras.
12 Os he prestado atención,
Y he aquí que no hay de vosotros quien redarguya a Job,
Y responda a sus razones.
13 Para que no digáis: Nosotros hemos hallado sabiduría;
Lo vence Dios, no el hombre.
14 Ahora bien, Job no dirigió contra mí sus palabras,
Ni yo le responderé con vuestras razones.
15 Se espantaron, no respondieron más;
Se les fueron los razonamientos.
16 Yo, pues, he esperado, pero no hablaban;
Más bien callaron y no respondieron más.
17 Por eso yo también responderé mi parte;
También yo declararé mi juicio.
18 Porque lleno estoy de palabras,
Y me apremia el espíritu dentro de mí.
19 De cierto mi corazón está como el vino que no tiene respiradero,
Y se rompe como odres nuevos.
20 Hablaré, pues, y respiraré;
Abriré mis labios, y responderé.
21 No haré ahora acepción de personas,
Ni usaré con nadie de títulos lisonjeros.
22 Porque no sé hablar lisonjas;
De otra manera, en breve mi Hacedor me consumiría.
Eliú justifica su derecho de contestar a Job
Eliú no había sido nombrado entre los amigos (Bildad, Zofar y Elifaz) de Job, algunos historiadores piensan que fue un testigo casual de la discusión, que quiso dar su opinión.

1.       Reflexionemos en el comportamiento de Eliú, estamos impresionados por la veces que este capítulo menciona que Eliú se llenó de ira, “Se encendió en ira contra Job”… (v2), “se encendió en ira con sus amigos” (v3) “Se encendió en ira porque no había respuesta” (v5). Me preguntaba porque Eliú sintió tanta ira?... la respuesta se encuentra más adelante. Creo que Eliú quería tomar el lugar de Dios, quería responder en ira a Job y que su “sabiduría” sirva para redargüir los razonamientos de Job (v12).

Cuanto nos parecemos a Eliú, muchas veces no nos importa herir a nuestros hermanos, señalarles las cosas que están mal, corregir, hablar, calificar. Amado(a) estas actitudes no corresponden al amor que Jesús nos ha mostrado, sino más bien estamos dando cabida al enemigo y contaminando nuestro corazón, amado(a) con humildad te invitó a que pidamos perdón a Dios, si hemos hecho esto o lo estamos haciendo ahora. Y nos comprometamos a actuar en amor para que seamos verdaderamente seguidores de Jesús. Amemos a nuestros hermanos como Jesús nos amó (Juan 13:35 “En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros”)

2.       Solamente con la ayuda del Señor, podemos aplacar las situaciones de contienda e ira, si controlamos nuestras palabras. Responder con amabilidad y delicadeza a nuestros hermanos permitirá la unidad para la Gloria de Dios.  Santiago 1:19- Proverbios 15:1.

Amado Señor, te pido perdón y me comprometo a no juzgar y morderme la lengua, antes de que esta despedace a los demás.

Oremos,
Equipo AATC




miércoles, 16 de julio de 2014

Job 31

Job 31 
31 Hice pacto con mis ojos;
¿Cómo, pues, había yo de mirar a una virgen? 
2 Porque ¿qué galardón me daría de arriba Dios,
Y qué heredad el Omnipotente desde las alturas? 
3 ¿No hay quebrantamiento para el impío,
Y extrañamiento para los que hacen iniquidad?
4 ¿No ve él mis caminos,
Y cuenta todos mis pasos?
5 Si anduve con mentira,
Y si mi pie se apresuró a engaño,
6 Péseme Dios en balanzas de justicia,
Y conocerá mi integridad.
7 Si mis pasos se apartaron del camino,
Si mi corazón se fue tras mis ojos,
Y si algo se pegó a mis manos,
8 Siembre yo, y otro coma,
Y sea arrancada mi siembra.
9 Si fue mi corazón engañado acerca de mujer,
Y si estuve acechando a la puerta de mi prójimo,
10 Muela para otro mi mujer,
Y sobre ella otros se encorven.
11 Porque es maldad e iniquidad
Que han de castigar los jueces.
12 Porque es fuego que devoraría hasta el Abadón,
Y consumiría toda mi hacienda.
13 Si hubiera tenido en poco el derecho de mi siervo y de mi sierva,
Cuando ellos contendían conmigo,
14 ¿Qué haría yo cuando Dios se levantase?
Y cuando él preguntara, ¿qué le respondería yo?
15 El que en el vientre me hizo a mí, ¿no lo hizo a él?
¿Y no nos dispuso uno mismo en la matriz?
16 Si estorbé el contento de los pobres,
E hice desfallecer los ojos de la viuda;
17 Si comí mi bocado solo,
Y no comió de él el huérfano
18 (Porque desde mi juventud creció conmigo como con un padre,
Y desde el vientre de mi madre fui guía de la viuda);
19 Si he visto que pereciera alguno sin vestido,
Y al menesteroso sin abrigo;
20 Si no me bendijeron sus lomos,
Y del vellón de mis ovejas se calentaron;
21 Si alcé contra el huérfano mi mano,
Aunque viese que me ayudaran en la puerta;
22 Mi espalda se caiga de mi hombro,
Y el hueso de mi brazo sea quebrado.
23 Porque temí el castigo de Dios,
Contra cuya majestad yo no tendría poder.
24 Si puse en el oro mi esperanza,
Y dije al oro: Mi confianza eres tú;
25 Si me alegré de que mis riquezas se multiplicasen,
Y de que mi mano hallase mucho;
26 Si he mirado al sol cuando resplandecía,
O a la luna cuando iba hermosa,
27 Y mi corazón se engañó en secreto,
Y mi boca besó mi mano;
28 Esto también sería maldad juzgada;
Porque habría negado al Dios soberano.
29 Si me alegré en el quebrantamiento del que me aborrecía,
Y me regocijé cuando le halló el mal
30 (Ni aun entregué al pecado mi lengua,
Pidiendo maldición para su alma);
31 Si mis siervos no decían:
¿Quién no se ha saciado de su carne?
32 (El forastero no pasaba fuera la noche;
Mis puertas abría al caminante);
33 Si encubrí como hombre mis transgresiones,
Escondiendo en mi seno mi iniquidad,
34 Porque tuve temor de la gran multitud,
Y el menosprecio de las familias me atemorizó,
Y callé, y no salí de mi puerta;
35 !!Quién me diera quien me oyese!
He aquí mi confianza es que el Omnipotente testificará por mí,
Aunque mi adversario me forme proceso.
36 Ciertamente yo lo llevaría sobre mi hombro,
Y me lo ceñiría como una corona.
37 Yo le contaría el número de mis pasos,
Y como príncipe me presentaría ante él.
38 Si mi tierra clama contra mí,
Y lloran todos sus surcos;
39 Si comí su sustancia sin dinero,
O afligí el alma de sus dueños,
40 En lugar de trigo me nazcan abrojos,
Y espinos en lugar de cebada. Aquí terminan las palabras de Job.
Job afirma su integridad
Job se examina cuidadosamente, y hace una evaluación de los caminos rectos que ha seguido, ha cometido algún pecado? (v7-8) , él afirma que no ha trasgredido la ley de Dios. Amado(a) analicemos la vida de Job, por medio de sus frutos:

1. No anduvo en mentiras (v5)
2. Amo a su prójimo (v9)
3. Respeto al siervo y a la sierva(v13)
4. Ayudo a los pobres, huérfanos y a las viudas (v16)
5. No puso su confianza en el dinero (v24)
6. Controlaba su lengua (v30)
7. Confesaba sus pecados (v33)
8. Ninguna de sus posesiones era ilegal (v1-4)
9. Confío siempre en el Señor (v35)

Constantemente temía el castigo de Dios (v23). Amado (a) reflexionemos en lo que significa para nosotros la Justicia de Dios, no nos engañemos el Señor es un Dios de amor, pero también es un Rey justo, que ha de juzgarnos a cada de uno, por lo que hemos hecho en la tierra. Vivamos por gracia SI! , pero con temor (reverente) de hacer cada cosa que le agrada, de preocuparnos por nuestra salvación, y nuestros frutos de justicia. Vivamos cada día conscientes que caminamos por ÉL y para ÉL (Coram Deo).

¿Creo en la justicia de Dios? ¿Es para mí Dios, un Rey justo o más bien un viejecito muy bueno que no está interesado en mi santidad?

Oremos,
Equipo AATC

martes, 15 de julio de 2014

Job 30

Job 30
1 »Pero hoy tengo que soportar las burlas de jovencitos a quienes doblo la edad; ¡a sus padres jamás les habría encomendado cuidar de los perros de mis rebaños!
2 ¿De qué me habría servido contar con ellos, si en los brazos no tenían ninguna fuerza?
3 Vagaban solitarios, muertos de hambre, huyendo de las sombras y de la soledad, 4 recogiendo hierbas del campo y haciendo fuego con raíces de enebro, 5 siendo rechazados por todo el mundo, y tratados a gritos, como si fueran ladrones; 6 viviendo en las barrancas de los arroyos, o en cuevas y entre las rocas, 7 aullando en medio de la maleza, y reuniéndose entre los espinos.
8 Gente envilecida, carente de nombre, de instintos tan bajos que no merecían vivir.
9 »Pero ahora soy su hazmerreír; soy para ellos objeto de burla.
10 Me rechazan, se alejan de mí, y aun se atreven a escupirme en la cara.
11 Como Dios me humilló y me soltó de su mano, me han perdido el respeto y se burlan de mí.
12 Me tienen rodeado, como una chusma, y me empujan de un lado a otro para hacer que yo caiga y me pierda.
13 Me cierran el paso, para destruirme, ¡se aprovechan de mi sufrimiento sin que nadie se lo impida!
14 ¡Se lanzan furiosos contra mí, como soldados que asaltan una muralla!
15 La confusión me domina; han lanzado mi honra por los aires; ¡mis riquezas se esfumaron como nubes!
16 »Una gran tristeza embarga mi alma; todo el tiempo me domina la aflicción.
17 Por las noches, el dolor me corroe los huesos, el sueño se me va, y ya no encuentro reposo.
18 ¡Tú, Dios mío, me sujetas la ropa por el cuello con tal violencia que siento que me ahogo!
19 Tú me has derribado por el suelo, y ahora soy como el polvo, ¡sólo soy ceniza!
20 Clamo a ti, y no me escuchas; a ti recurro, y ni siquiera me miras.
21 Te has vuelto muy cruel conmigo, pues me atacas con tu mano poderosa.
22 Me has hecho volar por los aires, y por los aires vuelo, como nada.
23 Bien sé que me llevas a la muerte, a la mansión reservada para todos los mortales.
24 »¿Acaso no se tiende la mano al necesitado cuando en su angustia reclama ayuda?
25 ¿Acaso no me apiadé del afligido y tuve compasión del que nada tenía?
26 Cuando yo esperaba el bien, me vino el mal; cuando esperaba la luz, me cayó la oscuridad.
27 Siento en mi interior una gran agitación; tiempos de aflicción me tienen abrumado.
28 Ando en penumbras, sin la luz del sol; en medio de la congregación me levanto y clamo,
29 Ahora soy compañero de los chacales y amigo de los avestruces.
30 La piel se me reseca, y se me desprende, y en los huesos siento un ardor insoportable.
31 De mi arpa brotan notas de tristeza; ¡de mi flauta salen cantos de lamento!

JOB SE DEFIENDE
Nuevamente Job expone su sentir para que entiendan su sufrimiento y sus amigos tengan piedad de él.
1.       Job es rechazado por los marginados (v.1-14)
Job es objeto de burlas y deprecio de jóvenes marginados de la comunidad judía. No le respetan ni lo honran, más bien lo atacan sin piedad.
P.A.: ¿He sido rechazado por alguien?, ¿me vengo de mi rechazo contra alguien más débil que yo?, ¿tengo piedad del sufrimiento del otro?
2.       Job expresa lo que siente (v.15-17; 24-31)
Job está triste y afligido, con dolores y sin dormir. Siente que nadie tiene piedad de él. Está afligido y en oscuridad con enfermedad y lamento.
P.A.: ¿Estoy respetando el dolor de los que sufren?, ¿qué estoy haciendo con los que padecen enfermedad o algún sufrimiento?, ¿los estoy consolando o los estoy atacando religiosamente?
3.       Job reclama a Dios (v.18-23)
Job señala que Dios ha sido violento con él, que lo ha derribado y no lo escucha. Considera que es cruel con él y está por morir.
P.A.: ¿Estoy reclamando a Dios por mi sufrimiento?, ¿soy honesto al orar y abrir mi corazón a Dios?, ¿creo que Dios puede obrar en mi vida y cambiar las cosas?

Oremos,

Equipo AATC


lunes, 14 de julio de 2014

Job 29

Job 29
1 Job retomó la palabra y dijo:
2 «¡Cómo quisiera volver a los tiempos pasados, a los días en que Dios me brindaba protección; 3 días en que su lámpara brillaba sobre mí, días en que a su luz andaba yo en la oscuridad, 4 cuando estaba yo en la flor de mi vida y el favor de Dios reposaba en mi hogar.
5 En aquel tiempo, el Omnipotente estaba conmigo, y mis hijos estaban en derredor mío; 6 me daba entonces el lujo de chapotear en leche, y de extraer de las piedras torrentes de aceite; 7 cuando salía yo a las puertas de la ciudad, me cedían un lugar para impartir justicia.
8 Los jóvenes, al verme, me cedían el paso, y los ancianos me recibían de pie.
9 La gente importante se quedaba callada, y con respeto se tapaban la boca.
10 A pesar de ser poderosos, guardaban silencio, como si la lengua se les quedara pegada.
11 “Bienaventurado”, me decían al escucharme, y los que me veían lo confirmaban.
12 »Y es que yo atendía el clamor de los pobres, y ayudaba a los huérfanos sin protección.
13 Los que estaban por morir me bendecían; a las viudas les alegraba el corazón.
14 La justicia caracterizaba mis actos; la justicia me cubría: era mi atuendo.
15 Para los ciegos, yo era sus ojos; para los cojos, yo era sus pies; 16 para los pobres, yo era su padre; para los extranjeros, yo era su defensor.
17 Yo aplacaba la furia de los malvados, y a sus víctimas las libraba de su poder.
18 Creía yo que moriría en mi lecho, y que tendría muchos años de vida.
19 Creí ser como un árbol plantado junto al agua, con verdes ramas, bañadas de rocío; 20 Creí también que podría ser más rico, y que en mis manos mi poder iría en aumento.
21 »Cuando yo hablaba, todo el mundo callaba y esperaba a escuchar mis consejos.
22 Nadie contradecía mis advertencias, sino que aceptaban con gusto mis razones.
23 Se quedaban a la espera de mis palabras, como tierra seca en espera de las lluvias tardías.
24 Apenas podían creer que yo les sonriera; y no se perdían una sola de mis sonrisas.
25 Yo decidía lo que tenían que hacer, y en la mesa yo ocupaba la cabecera; era como un rey al frente de su ejército, ¡como alguien que consuela a los que lloran!

JOB AÑORA TIEMPOS PASADOS
Job hace un listado de lo que Dios le había dado antes de las aflicciones. Job quisiera volver a los tiempos antiguos. En aquellos tiempos:
1.       Dios le daba protección y estaba con él (v.1-2). Job confiesa que tuvo una relación amical con Dios.
2.       Estaba en la flor de la vida disfrutando de su familia (v.3-6)
3.       Impartía justicia, como hombre importante de la comunidad. Era justo (v.7; 14)
4.       Recibía honor de jóvenes y ancianos (v.8-10)
5.       Ayudaba y defendía a los necesitados y débiles (v.12-13;  15-17)
6.       Pensaba que iba a vivir muchos años e iba a ser rico (v.18-20)
7.       Era un buen consejero (v.21-23)
8.       Daba alegría (v.24)
9.       Se sentía como un rey (v.25)
P.A.: ¿Tengo una relación personal con Dios?, ¿soy amigo de Dios?, ¿estoy disfrutando de mi familia hoy?, ¿Dios me está dando gracia ante los demás?, ¿estoy buscando ayudar y apoyar a los necesitados?, ¿me creo eterno e inmortal?, ¿estoy buscando sólo mi realización personal y material dejando toda inversión por lo espiritual y eterno?, ¿me siento propietario de lo que Dios me ha dado?

Oremos,
Equipo AATC