miércoles, 1 de junio de 2011

Salmos 32

Salmos 32
1 Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado.
2 Bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad, Y en cuyo espíritu no hay engaño.
3 Mientras callé, se envejecieron mis huesos En mi gemir todo el día.
4 Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; Se volvió mi verdor en sequedades de verano. Selah
5 Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová;  Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Selah
6 Por esto orará a ti todo santo en el tiempo en que puedas ser hallado; Ciertamente en la inundación de muchas aguas no llegarán éstas a él.
7 Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; Con cánticos de liberación me rodearás. Selah
8 Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; Sobre ti fijaré mis ojos.
9 No seáis como el caballo, o como el mulo, sin entendimiento, Que han de ser sujetados con cabestro y con freno, Porque si no, no se acercan a ti.
10 Muchos dolores habrá para el impío; Mas al que espera en Jehová, le rodea la misericordia.
11 Alegraos en Jehová y gozaos, justos; Y cantad con júbilo todos vosotros los rectos de corazón.

UN SALMO DE CONFESION
David  señala que la falta de confesión le afecta su salud física y emocional (v.1, 3-4), pero su verdadero arrepentimiento le da esperanza:
1.      David es sincero en su confesión por haber pecado (v.5a). ¿Estoy siendo totalmente sincero con Dios?, ¿hay algo que le puedo ocultar?
2.      David está convencido del perdón de Dios (v.5b). ¿Confío en el perdón divino?
3.      David ora en todo tiempo (v.6). ¿Estoy orando constantemente?
4.      David confía en la protección de Dios (v.7). ¿Dios es mi refugio?
5.      David sabe que Dios guiará su vida (v.8). ¿Está guiando Dios mi vida?
6.      David tiene esperanza y júbilo (v.10-11). ¿Tengo esperanza?, ¿tengo gozo?

Oremos,

Pedro

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